lunes, 1 de diciembre de 2008

El espíritu de los Jayhawks sigue vivo. Luoris&Olson en Madrid.

Debo empezar por confesar que descubrí a los Jayhawks hace apenas 3 años cuando mi hermano pequeño -qué deshonor- me regaló el "Hollywood Town Hall". Poco después adquirí, ya por propia iniciativa, ese monumento a la música imperecedera que es "Tomorrow the Green Grass" y desde entonces mi pasión por el grupo no ha dejado de crecer. No tuve que lamentar, por tanto, el trauma del abandono de Mark Olson, cuando decidió retirarse al desierto con su novia, la también cantante Victoria Williams. Para el tiempo en que me aficioné al grupo, el tal Olson había recuperado la cordura -esto es, se había separado- y había parido uno de esos discos -"The Salvation Blues"- que redime la carrera de cualquiera por maltrecha que se encuentre. Tampoco Gary Louris se había quedado parado: su album "Vagabound" todavía destilaba la vieja savia del mítico grupo. Pero, claro, se echaba en falta la magia de esas armonías celestiales que constituyen las señas de identidad de la pareja Olson&Louris. El concierto en Madrid el sábado pasado fue la mejor prueba al respecto y el Galileo Galilei el mejor escenario posible.

Con un lleno absoluto -agotadas las localidades- Olson & Louris comparecieron para presentar su nuevo album como pareja: "Ready for the flood". No necesitaron para ello más que dos guitarras acústicas -las mismas, todo el concierto- y el solo acompañamiento de una mujeruca de armas tomar que ejerció -con un bombo entre las piernas- de sección rítmica. Casi dos horas de concierto y ninguna canción mediocre, ningún tema de más. Del nuevo disco sonaron entre otras "Bicycle", "When the wind comes up" o "Black eyes": no desmerecen el repertorio, lo enriquecen. Pero el entusiasmo se desató entre el público al arrullo de las viejas melodías: "Waiting for the sun", "Two angels", "Over my shoulder" o "Sister Cry". Hasta el propio Louris se sorprendió de la reacción del auditorio: al comienzo de "Bad times" un coro de voces -"I'm in love with the girl I'm talking about... ..."- se levantó hasta acallar la suya. Para cuando llegó la guinda final -"Blue"- era imposible pedir más.

Cuesta creer la cantidad de buenos grupos y buenas canciones que ha dado esa irrepetible generación/círculo de cantautores norteamericanos: Uncle Tupelo, The Jayhawks, Wilco, Golden Smog, el gran Jeff Twedy. Audiciones complementarias que me permito recomendar: la edición acústica del "Vagabound" de Louris (se puede encontrar en las habituales tiendas de culto") y el recopilatorio "Stay Golden, Smog", un album redondo. Lo dicho: el espíritu de los Jayhawks sigue vivo y sobrevoló por un par de horas en la madrileña sala Galileo Galilei. God bess America!

Antonio

1 comentario:

javierzaci dijo...

Antonio escribe bien, es un gran abogado, y no sólo por su apellido, y comparte el gusto por los sonidos claros y las guitarras luminosas. Que siga él publicando por aqui y que cunda el ejemplo!
Bienvenido!! Javier