sábado, 9 de agosto de 2008

Sonidos oscuros desde NY

Interpol no son una mera copia de los Joy Division. Eso no quiere decir que no se pueda ir a un concierto de estos neoyorquinos desde lejos y con unas birras y algo de comer en la mano. Apareció mi amigo Agustin que había estado mamandose la noche anterior con los Sex pistols en el backstage. Nos promete copas con Blondie. Los interpol tocaron mucho. Sonaron cosas de su primero turn on the Bright Lights (2002) que fue el que les puso en el mapa, y también el último, Our Love to Admire que me parece que está bien, aunque me gustó más el primero.

el poder rubio

Después lo de Blondie fue la regresión, la vuelta definitiva al pasado. Estaban todas sus canciones, y ni ella se ha vuelto una completa viejita, ni desde luego sus canciones han peridio brillo. Tenemos un mundo interior.... eso me suena, y en él está también Blondie, Debbie Harry y el grupo que siempre fue injustamente hecho de menos por la presencia de su cantante, y desde luego el disco que hay que tener de ellos, el Parallel lines, de 1978, con la canción que sonó al principio del concierto, Hanging on the telephone, versión de los imprescindibles The Nerves (supongo que todos tenemos su disco) Heart of Glass, Picture This o One way or another, y los éxitos posteriores como Call me,que siempre me pareció un éxito algo menor que los anteriores, pero... nos tenías que haber visto bailar! y the tide is high, y por fin Maria, un hit del 99 que en nada desmerece los anteriores. Presencia y sonido y nosotros felices; nunca había visto en vivo a Blondie; este Summercase sigue pagando deudas históricas.

jueves, 7 de agosto de 2008


Nick Cave, más de 25 años despues de Birthday Party


No ha mejorado, sigue siendo un digno descendiente de los primeros pobladores de Australia. Bueno, aprendió modales, aunque le queda bastante de su actitud y su aura, y de sus letras. Hace unos años que quiere agradar, que no le importa que le vean disfrutar mientras actúa (y también canta) . Todavia recuerdo la primera vez que le ví con los Bad Seeds, y antes, la primera que oí a los Birthday Party, en los primeros ochenta, vaya fiesta demente! Post punk blues atomentado y enloquecido. Recuerdo que ya más tarde, en el 87, aparecían en una pelicula que en aquélla epoca era completamente de culto, el Cielo sobre Berlin, de Wim Wenders, en la que dos ángeles se dedicaban a vagar por el Berlin de los ochenta. Fuí a verla varias veces, pero ni la mitad de veces que fue mi amigo Juanjo.
Sono muy bien, como siempre. El y sus compinches de tantos años, que se notan como complicidad en el escenario. Buen disco el de Grindeman, mejor en directo.