sábado, 24 de enero de 2009

Añicos en Madrid: los grandes Smithereens

Miércoles 21 a las ocho y media, consigo aparcar cerca del Joy Eslava. Tocan los Smithereens (en inglés los añicos). Los sufridos lectores de este blog recordaran que hace meses recomendé precisamente a este grupo y su imprescindible Especially for You de 1986, y me referí a su anterior visita a Madrid. Han hecho últimanente dos discos (recomendables) de versiones de los Beatles y se han decidido a hacer uno nuevo dedicado a the Who.

Antes toca un power trio de aqui los Delco, sonido sólido, indie americano: el cantante y guitarra lo hace bien y tiene una buena voz. Beautiness está bien.

Los Smithereens salen en seguida y no tienen piedad. Tienen infinidad de grandes momentos y todos aparecen uno tras otro. Disfrutan mucho y se refieren a su concierto anterior en Madrid, en el que estuve y todavia recuerdo como uno de los memorables de los ultimos ochenta. Hablan con el público. Se presentan; nuevo y magnífico bajista que viene de California y nació en Manila. Músicos eficacces y contundentes. Sonido reguilar; la bateria suena muy bien, el bajo también, pero la voz a veces se pierde. Tocan todas sus grandes canciones del Especially for you (el gran Strangers When We Meet, Listen to Me Girl, Groovy Tuesday, Cigarette...
In a Lonely Place, oh, si!) y también éxitos posteriores como el Only a Memory, A Girl Like You o Yesterday girl. El grupo en forma. Pat Dinizio creo que ha engordado cien kilos en los últimos años: su Strato parecía una guitarra de juguete flotando en su tripa. Eso si; miles de flacos ya querrían cantar y tocar como él!
Terminan encadenando la obertura de Quadrophenia de The Who y al fin acaban con la enorme Behind Blue eyes. Satisfacción. En primera fila con nosotros, me encuentro a mi primo Nacho. Me voy a por unas cañas con Pablo y un amigo suyo.
Grandes momentos. Javier

miércoles, 21 de enero de 2009

Primary 5 y The Brass Buttons


El jueves 15 fue otro largo jueves, y lo que es peor, después de un largo miercoles con cena de amigos del colegio. En fin, pregunté a mi amigo Pablo si ibamos a ver a Calexico, y aunque me reconociò que a él tambien le gusta mucho (yo tengo alguna de sus canciones entre mis favoritas), me recomendó que le acompañara este jueves a la pequeña Betty (un garito de tamaño pequeño indicado para músicos con un grupo selecto -y como selecto, reducido- de devotos).

Organizaba Rock indiana que trajo a los escoceses Primary 5 (por cierto el acento escocés ayudó a que el público no pillara casi nada de todas las cosas que Paul Quinn nos queria transmitir entre canción y canción).

Antes tocaron de teloneros The Brass Buttons (nombre tomado de una canción de Gram Parsons), grupo del Puerto de Santa Maria -tocan el 23 alli en el garito que más me gusta de alli, el Milwakee-. Acaban de grabar su primer disco producido por Paco Loco para Rock Indiana: Wet behind the ears; folk rock americano hecho con cariño. En disco suena mejor de lo que vimos alli. Maria canta bien pero me pareció algo nerviosa y parada. Llevaba una bonita camisa muy Lucinda Williams. La sección ritmica se despistó algo al final, pero es un grupo que me gustó y que hay que seguir. American dream ha estado sonando varios dias seguidos en el equipo del coche. Me gusta la melodia y la forma de acentuarla con esos muros de guitarras que nos remiten otra vez a los Tenneage FC.

The Primary 5 son otra cosa. Grupo de escoceses formado por Paul Quinn, el antiguo batería de los Teenage Fanclub (en el Grand Prix o el Songs from Northern Britain) que estuvo con los Soup dragons, que tuvieron unos cuantos singles en los ochenta y también algún éxito de pop más o menos bailable (divine thing, hang-ten, sobre todo el I am free, que ya se que todo el mundo que lee este blog conoce). De los imprescindibles Teenage Fanclub ya hablaremos mucho más largo y tendido, pero no hoy.

En fin, en el 2000, este Paul por fin cogió una guitarra, se puso a componer sus canciones, que podrían ser de los Teenage, y formó su propio grupo con sus colegas, bastante más jovenes que él. Tienen tres discos. Se dice que el segundo es el mejor disco de los Teenage desde el Grand Prix. Tocaron muchas del tercero, High Five, que es muy bueno, aunque a veces tienen un punto empalajoso. Se me acerco un tipo grandote que es un amigo del colegio, Adolfo, al que no veía desde hacia años. En fin, es que hay que salir. Javier