jueves, 31 de julio de 2008

Sabado en Summercase

Cuando conseguimos aparcar (nos costo algo más que el primer día, lo del pase vip fue menos efectivo esta vez), empezamos a oir las últimas canciones de la actuación de Edwyn Collins. Siempre me ha gustado mucho el que se llamó rock escocés. Desde fuera del recinto sonaba bien eso de Never met a girl like you (before). También me gusta lo último que este tio publicó. Quizás sea cada vez más música para oir en zapatillas, vale, pero también hay domingos lluviosos, por dentro o ... por fuera, y a eso suena también el Home Again, y eso tan bonito de One is a lonely number, oh cielos estos románticos! Tenemos que hablar un día de los Orange Juice.
Llegamos para oir las últimas canciones de Ian Brown, que sigue estando en plena forma, aunque nunca podrá superar el primer discazo de los Stones Roses. Con una banda muy sólida, encadenó alguno de sus singles más celebrados y tocó cosas de su último disco. Lástima que cuando más contentos estabamos se fueran. Luego hicimos tiempo con unos chicos, creo que londineses, que se divertían mucho y que hacian algo así como pop bailable. Se llaman Whitey, aunque no se si es el nombre de uno de ellos o si se refiere a toda la banda. No los conocía y ...no me había perdido tanto hasta ahora. Una caja de ritmos a la que alguien que debía ser el bateria añadía un crash cada rato; el bateria con menos trabajo que he visto en los últimos años. A partir tercera canción el interés fue decreciendo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No sé si habrás leído mi recomendación de Idlewild, escoceses también. ¿Qué tiene esa tierra que es tan fértil en bandas de rock?. Todavía añoro a los GUN y su inolvidable concierto en el Divino. Será la climatología que incita a cubrirse en un garaje y empezar a tocar. Sería un interesante estudio esto de las bandas escocesas.
Un saludo.