martes, 8 de julio de 2008

Maria Gustavo y Javier, y otros setenta y seis mil

Al final si fuimos a Rock in Rio, sin Quico que esta rompiendo aguas. Vimos de lejos a los delincuentes, mientras nos acercabamos al escenario principal a ver a los Stereophonics, que me gustaron bastante y dieron su ración de cañita sin hacer daño. Hacia calor, nos daba el sol de frente y la gente bailaba y se tiraba en tiralina. Luego vino Ami, de pronto aparecieron unos cuantos millones más y empezamos a corear y bailar. La Winehouse no estába en su mejor momento, aunque hizo un concierto muy correcto y metió en él su voz. Tampoco está en su peor momento, aunque casi prefiero no imaginarmelo. Se quito los taconazos que llevaba y que por poco le hacen caer y se agarró a un copon de vino al que se aficionó entre canción y canción. Aparte de sus canciones, con el magnifico Rehab, tuvo el detalle de meter nada menos que el Rudy, a message to you, de los esenciales Specials y el necesario Bring it on Home to me del gran Sam Cooke. Sólo por esas dos canciones, se le perdona todo a esta chiquilla.

Después, pues a bailar como locos con el incansable Jamiroquai y ... vaya, también salió Shakira, de ellos dos hablaremos después. Abrazos

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